Empieza el curso anual de interpretación ante cámara para niñ@s y jóvenes, ya hemos tenido una primera sesión para conocernos, las próximas semanas llegarán las últimas incorporaciones.
Me encantan las primeras clases, momentos de nervios y expectación, los alumn@s más veteranos deseosos de conocer a las nuevas incorporaciones, y las nuevas incorporaciones con ganas de probar de qué se trata. Me gusta cómo les hacen sentir cómodos rápidamente y se interesan por conocerse. Tod@s diferentes pero unidos por tener la misma pasión por la interpretación.
Las primeras sesiones son claves para conocernos, formar los cimientos de lo que será un buen equipo de trabajo y fijar objetivos.
Ellos se presentan, explican sus inquietudes y porque han sentido la llamada de “quiero ser actor”, “quiero ser actriz”, los motivos son diversos, desde el “quiero rodar una película en Hollywood”, hasta el “quiero actuar para ponerme en la piel de otros personajes”. Sea por lo que sea ahí están para aprender todo un año, y seguramente obtendrán beneficios personales que en un principio ni se han planteado, sobre los beneficios del teatro o la interpretación, ya sea para niñ@s, adolescentes o adultos, tendré que hablar otro día, que da para mucho, pero sigo con lo que estoy hoy.
Este año he enfocado las escenas que trabajaremos con una temática que podemos nombrar como: “¡Rompamos los estereotipos!» trabajaremos temas como el respeto, la igualdad, el género y como bien dice romperemos estereotipos. Me gusta que sean conscientes que actuar no es sólo para nuestro disfrute e enriquecimiento, sino que la interpretación nos ofrece una herramienta poderosa de comunicarnos con el resto, de dar nuestra opinión, de hacer reír si queremos, pero también de reflexionar. Y este año tenemos este mensaje tan necesario.
Estuvimos hablando de cuándo se han podido sentir excluidos en algún momento, ya sea por ser catalogados como “diferentes”, por su género, por llevar gafas, por querer hacer una actividad considerada para niñas o para niños, etc. Me encantó escuchar sus propios casos y también aquellos casos que conocían de cerca. También hablamos de cómo podemos ayudar a aquellos que se sienten excluidos por cualquier motivo. Coincidimos al instante en que todos merecen respeto, y que todos deben sentirse con libertad de manifestar sus gustos y preferencias, así como de respetar e interesarse por la diversidad, y no atacarla. Reconocimos que parece haber un primer instinto de crítica cuando vemos a alguien diferente a nosotros, porque se nos sale de lo “conocido” de nuestra “zona de confort”, así que este año vamos a poner atención a ello para mejorarlo y aportar nuestro granito de arena.
Me emociona ver la ilusión con la que acogieron el proyecto, más allá del hecho que aprenderán a mejorar su técnica frente a cámara, hacer mejores castings o incluso conducir la Gala «¡Rompamos los estereotipos!» que tendrá lugar el sábado 18 de Mayo en el Espai Maragall de Gavà. Una gala en la que se proyectarán las escenas trabajadas durante el curso, acompañadas de actuaciones en directo, y juntos lanzaremos ese precioso mensaje.
¡Tenemos mucho trabajo y responsabilidad, pero nos gusta! ¡Adelante gamusinos*!
*En otro post deberé explicar el porqué de este nombre.
- Fotograma del cortometraje «Mirando las nubes» dirigido por Laura Yuste